Una de las palabras más difíciles de pronunciar, pero es de las mejores para arrebatarnos ese bagaje de malos pensamientos hacia alguien o incluso hacia nosotros.
El perdón, de los dientes hacia adentro, causa un efecto benéfico para quien lo practica. No es un acto de misericordia ni de condescendencia, es el encuentro contigo mismo y con tu ser que te dice que no hay nada que perdonar. Si no te crees con el valor de decirlo frente a quien lo quieres decir, cierra tus ojos y desde ahí perdona.
Para algunos será muy difícil e incluso imposible. Recuerden que si hacemos las cosas fáciles la vida será difícil, pero si hacemos las cosas difíciles la vida será fácil.
No le estás haciendo bien a quien perdonas, el bien es para ti. No hay algo mejor para el bienestar emocional que la practica del perdón que te libera de esos grilletes de una identidad que hiciste tuya por algún tiempo.
Perdona, pero sobre todo hazlo contigo con amor, te darás cuenta que es así porque no habrá exigencias ni chantajes, entonces y solo entonces perdonarás con amor.
1 comentario:
Hola
Gracias por tus palabras. Eso me motiva a seguir.
Saludos y gracias por pasar.
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